¿Narco - Terrorismo?

Terrible y pésima descripción de la situación actual de inseguridad que vive nuestro estado; la determinación de denominar al problema del narcotráfico como grupos terroristas es simplista y quizás hasta conveniente para algunos grupos de poder.

Asumir que se trata de grupos terrorista no atiende ni al significado de terrorismo que implica una RAZON DE DAÑO POR CUESTION POLITICA, RELIGIOSA O DE CULTO ALGUNO. Los grupos delincuenciales del narco no actúan por razón de ellas; su fin único y primigenio es el económico y se rigen bajo la ¨Simplicidad¨ de una empresa como cualquier otra. Son empresarios con un producto ilícito y que luego migran a otro tipo de delitos que no tienen que ver con narcóticos. El hecho de que utilicen ahora bombas terrestres, armas de alto calibre, drones etc. No implica el termino inmediato.

Ahora bien el narcotráfico ahora llamada por el Código Nacional de Procedimientos Penales como DELITOS CONTRA LA SALUD muestra con gran genio y sabiduría al definir, que el fin último es la vulneración de un grupo adicto a una sustancia química o natural. Pero también a nuestra experiencia y punto de vista tiene el gran fondo del porque MEXICO no ha podido por décadas desvincularla de una violencia que se acrecienta y por tanto irriga a otros sectores como el político, empresarial y el del ciudadano de a pie. Nos referimos a que la competencia de acción y sanción es federal. Error, pues si bien es cierto que el arsenal sobrepasa a la municipalidad y el estado; también es cierto que el grupo delincuencial crece y se nutre de la colonia de origen, bajo el amparo de autoridad municipal y estatal; probando con ello que si no se ataca ahora a esas autoridades, absurdo pensar en un control o disminución del régimen delictivo de éste tipo.

El poder de fuego con el que cuentan actualmente es proporcional a la facilidad con la que en los ESTADOS UNIDOS se puede adquirir armas de alto calibre. No es aventurado pensar que aunque el principal consumidor drogadicto sea nuestro vecino del norte; le sea conveniente que en el circulo del negocio del narcotráfico se beneficie el sector armamentista pilar de la economía norteamericana.

Un policía, un abogado, un regidor, diputado, presidente municipal o un simple ciudadano enfrenta si quisiera oponerse a esta cultura del narcotráfico, una industria que es armamentista y de consumo de drogas que irriga no solo ya los estados unidos si no también nuestras colonias ya.

Acuñar como lo intentaron algunos políticos norteamericanos el termino grupos terroristas a los grupos del narcotráfico es hasta diabólico pues persigue sus intereses armamentistas, pues no olvidemos que ese término permitió y legitimó la invasión a países árabes y de los que la evidencia arroja que los impulsos reales eran petroleros y de reactivación de la mecánica armamentista que mantiene ese país.

Los estados en su afán facilista, conveniente e irresponsable, ceden so pretexto de competencia federal el problema de la delincuencia organizada al presidente de la republica y su Guardia Nacional. La historia nos está mostrando que el político como todo ciudadano a pesar de ser un ser iluminado, es tentado por las garras de la codicia producto del dinero de procedencia ilícita. Lo mantiene, lo cuida y lo protege. El problema es que crece y está irrigándose pudriendo nuestros extractos sociales desde el mas alto hasta el mas bajo. La RESPONSABILIDAD es del político en el poder. Así de sencillo, por desgracia no tienen el conocimiento y simplemente se dejan utilizar por un sistema ya por demás podrido.

El estudio y análisis amerita expertos reales que no pierdan de vista que el ciudadano Jalisciense, el Mexicano es PRIMERO. Debemos buscar una CULTURA DE LA PAZ sin quedar solo en la demagogia. Es un problema en cadena pero por algo se debe iniciar.

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